¿Cuál es el consumo turístico?
La energía es un recurso imprescindible para producir cualquier bien de consumo, para calentarnos o para desplazarnos. Es el motor que mueve el desarrollo, pero también es la causa de algunos de los problemas ambientales más graves del planeta.
En los alojamientos turísticos la energía es una de las partidas presupuestarias más importantes, representando el 20% de los gastos totales (sin incluir gastos de personal). Del concepto de energía el 75% pertenece a electricidad y dentro de este, el aire acondicionado representa el 20%.
En muchos establecimientos, el coste de la energía es el segundo de los gastos de funcionamiento, después de los salarios.
¿Cómo se puede ahorrar energía?
Algunos consejos:
- Recordar importancia del apagado de las luces
- Usar bombillas compactas de bajo consumo
- Instalar un sistema de control y regulación de la luz
- Usar una regulación manual de temperatura no inferior a 22º en verano, ni superior a 25º en invierno
- Usar acristalamiento doble en ventanas para mantener la temperatura interior
- Elegir modelos de aire acondicionado más eficiente.
- Utilizar electrodomésticos en forma eficiente.
- Usar programas de lavado en frío y a plena carga en la lavandería.
- Utilizar los equipos informáticos en modo de bajo consumo.
- Cambiar equipos antiguos que no hagan uso eficiente de energía.
- Instalar interruptores con temporizador, que se apaguen solos automáticamente.
- Desconectar los sistemas eléctricos sin uso.
- Usar gas natural, que es más eficiente y limpio que cualquier otra fuente de energía no renovable.
- Instalar dispositivos basados en energías renovables (pequeños aerogeneradores, placas solares-térmicas, paneles fotovoltaicos.) siempre que sea posible.
- Aprovechar al máximo la luz natural.
- Si se va a ampliar el negocio informarse acerca de la arquitectura Bioclimática
- Implicar al personal laboral y clientes a adoptar hábitos de ahorro de energía